Hermandades

Cofradía de Nuestra Señora del Rosario

por | 7 Abr 2025 | Hermandades | 0 Comentarios

En los albores de la historia abanquina, cuando el viento aún susurraba secretos en lengua ancestral, una Señora vestida de sol marcó el rumbo de su pueblo con ternura divina y firmeza maternal. La tradición oral recoge una leyenda que no se olvida: la Virgen del Rosario, cuya imagen sagrada habitaba en una humilde capilla en Qorwani —el antiguo emplazamiento de la ciudad—, desaparecía misteriosamente una y otra vez, para reaparecer sobre una inmensa roca en tierras más bajas.

El pueblo, con corazón creyente y alma obediente, comprendió el deseo de su Madre. Abandonó su asentamiento original y se trasladó a aquel lugar señalado por la presencia celestial, donde hoy se alza majestuosa la Iglesia Catedral de Abancay, erigida como trono para la Reina del Rosario.

Desde hace algún tiempo, la Cofradía de Nuestra Señora del Rosario custodia con amor y reverencia esta antigua devoción, que no ha hecho sino crecer con los siglos. En sus filas se congregan generaciones de fieles que, rosario en mano y esperanza en el alma, mantienen viva la llama de una fe que se dejó guiar por una aparición silenciosa pero luminosa.

Cada octubre, la ciudad entera se estremece de gozo y gratitud al celebrar su fiesta: flores, cantos, procesiones y promesas tejidas en secreto acompañan a la Virgen, mientras los corazones abanquinos repiten con emoción: «Ave María, llena eres de gracia, guía una vez más nuestro caminar.»

Así, Abancay no se explica sin Ella. Pues si el pueblo se asentó donde quiso la Virgen, es porque también su historia, su templo y su corazón se han edificado bajo el amparo del Rosario bendito.

La presidenta de la Cofradía es la Lic. Maryluz Elguera Hilares.